Páginas

Traductor

LA REVELACION DE JESUCRISTO - 6


Apocalipsis Capítulo 6


Antes de mirar este capítulo, permítanme decir unos pocos hechos importantes referentes al rollo que fue sellado con siete sellos (ver Ap. 5). La mayoría de los predicadores del "Mensaje del Tiempo Final" creen que el Séptimo Sello fue abierto en 1963 por el hermano William Marrion Branham, el Séptimo Angel a la Séptima Edad de la Iglesia. Ellos creen que los Siete Sellos sólo podían ser abiertos un poco antes del cierre de la Edad de la Iglesia porque el Libro de Apocalipsis es un libro profético.

Firmemente creo que tal exégesis es completamente errónea. El Libro de Apocalipsis, claramente nos muestra que el Cordero tomó el rollo sellado con siete sellos de la mano derecha del Unico Todopoderoso, que estaba sentado en el trono. El, luego comenzó a romper y a abrir los siete sellos uno por uno. Esto tomó lugar, en algún momento en el año 96 d.C. cuando al Apóstol Juan le fue dado el privilegio de ser el único testigo terrenalmente. Cuando cada sello fue roto algo pasó. Los "contenidos" de todos y cada uno de los sellos fueron develados y expuestos a Juan, pero, en forma simbólica. Sin embargo, la revelación completa de los Siete Sellos fue dada a los santos solo en 1963. La revelación de los sellos disponía a los santos a saber qué es lo que tomaría lugar en el futuro y a saber qué había tenido lugar en el pasado. Pero los santos primitivos sólo pudieron entender en fragmentos lo que esos símbolos proféticos suponían representar, referente a futuros eventos en los tiempos posteriores a ellos.

Así que, está claro que hay una apertura, una revelación y un cumplimiento para cada sello. Los Siete Sellos en el "Título de propiedad", realmente estaban en camino de realizar el pleno cumplimiento de la redención. Por lo tanto debían ser rotos. Por eso es que el Cordero tenía que despegar y desprender los sellos uno por uno. Cuando cada sello estuvo roto y abierto, los "contenidos", que fueron revelados, debían ser cumplidos. Y cada cumplimiento de "contenidos", trajo un paso más hacia la realización plena de la redención. Cuando el Séptimo Sello fue abierto, todo el "Título de Propiedad" pudo ser desenrollado, para revelar todos sus contenidos, los cuales estaban escritos en ambos lados (ver Ap. 5: 1-4). Sólo cuando el Séptimo Sello estuviera cumplido, los contenidos (del rollo) podrían ser reclamados en su totalidad.

Aquí ahora, un poco de información sobre los pergaminos antiguos. Estos contenían escrituras ordenadas en pequeñas columnas a lo largo del papiro, con un asa de madera en cada extremo. Las asas sobresalían escasamente y el papiro se enrollaba o se desenrollaba manualmente mediante ambas asas. Cuando rollos importantes eran transportados o acopiados, se cerraban y se ataban para asegurarlos con cuerdas o se envolvían con largas piezas de tela.

Los siete sellos en el rollo de la visión de Juan, eran más probablemente siete anillos de arcilla cocida rodeando el pergamino enrollado, con la firma del propietario impresa en cada sello.

Ahora, con la revelación dada en 1963, podremos entender lo que Juan vio en su visión mientras el Cordero abría los Siete Sellos.

El Primer Sello

Verso 1:

"Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira".

Observe que, cuando el Primer Sello fue abierto, Juan escuchó a una de las cuatro criaturas vivientes dando una orden, con una voz como "un trueno". Cuando siete ángeles visitaron al Hno. William Branham en 1963, durante una excursión de cacería en Arizona, en Estados Unidos, hubo una explosión ensordecedora. Esta explosión no comprueba que los Siete Truenos, mencionados en Apocalipsis 10, sean lo mismo que los Siete Sellos cuando fueron abiertos. Esta es una falacia común, difundida entre los Branhamitas.

La orden o anuncio fue "¡ Ven !", y no "¡ Ven y mira !". La palabra "Ven", también puede ser traducida como "Anda". Fue dirigida hacia "algo" que apareció cuando el primer sello fue abierto. No fue dirigida a Juan. La orden "¡Ven!" fue dicha cada vez que cada uno de los primeros cuatro sellos era abierto. "El primer ser viviente era semejante a un león; el segundo ser semejante a un becerro; el tercero tenía rostro como de hombre; y el cuarto era semejante a un águila volando" (Ap. 4:7). El orden en que cada una aparecía era importante, porque esta era la contramedida de Dios para combatir al espíritu del Anticristo, el cual salía del dominio de Satanás, en cuatro formas sucesivas e intensivas, simbolizadas por el caballo blanco, el caballo rojo, el caballo negro y el caballo pálido, a lo largo de la Edad de la Iglesia.

Verso 2:

"Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo y para vencer".

Cuando la criatura semejante al león, alzó su voz como trueno y dijo: "¡Anda!", Juan miró y vio un Caballo Blanco aparecer, con un Jinete sobre él. El tenía un arco y le fue dada una corona, y salió como un vencedor en la conquista.

Ahora, el Caballo Blanco y su Jinete, que Juan vio en esta visión, no salieron del rollo escrito o "Título de Propiedad", cuando el Primer Sello fue roto. Algunos predicadores tienen la noción errónea de que el Caballo Blanco y su Jinete, salieron del rollo escrito cuando el Sello fue abierto. Ellos interpretan que el Caballo Blanco y su Jinete era parte del misterio escrito en el rollo. Ellos tienen la misma interpretación para todos los Siete Sellos. Sin embargo, la verdad es que la visión fue un resultado de la apertura del sello en sí mismo. No tiene nada que ver con lo que estaba escrito en el rollo. Nada salió ni se escabulló del rollo. Nada fue leído de él porque este continuaba sellado con los otros seis sellos.

En las profecías de la Biblia, un animal usualmente simboliza un movimiento o creencia poderoso y dominante - un ISMO, el cual puede ser político o religioso, o ambos. Hay un espíritu detrás de cada ISMO. Por ejemplo, China está gobernada por el COMUNISMO, y es representada por el Dragón Oriental. El Comunismo es una ideología política y religiosa a la vez. Es movida por un espíritu anti-Dios, a través de la "cabeza" de la bestia, los líderes del gobierno.

Cada nación e imperio del mundo, comenzó con el Imperio Babilónico de Nimrod (ver Gén. 11), el cual estaba fundado básicamente sobre una idea o principio religioso. Cuando la idea o principio se instala entre la gente, un movimiento, un ISMO, es formado. El grupo se convertirá en una tribu con una cierta identidad política. A través del tiempo se convertirán en una nación y, mediante la agresión, puede convertirse en un imperio.

A estas alturas, debemos dar un breve vistazo a las dos Bestias y a la Imagen de la Bestia, descriptas en Apocalipsis capítulo 13, y ver lo que simbolizan. La Primera Bestia, que subió del mar, está identificada con el Romanismo en su fase final. Esta era una Bestia compuesta que encarnaba los espíritus de las otras Bestias, las cuales habían aparecido antes. El modo en que esta bestia fue mostrada a Juan, nos revela que ha venido por un largo camino, desde los tiempos de Abraham, porque era la SEMILLA DE ABRAHAM, "por la justicia de la fe" (Rom. 4:13), lo que Satanás quería destruir. La Segunda Bestia, que salió de la tierra, está identificada con el Americanismo. Esta Bestia (Americanismo), mandaría a la gente a crear una Imagen a la Primera Bestia (Romanismo o Bestia Romana). La Imagen de la Primera Bestia se identifica con el Ecumenismo (el movimiento Ecuménico).

Ahora, después de que el Primer Sello fue abierto, Juan vio un Caballo Blanco con un Jinete, el cual tenía un arco y le fue dada una corona, y cabalgó como conquistador yendo a la conquista. Aquí vemos la falsificación de Satanás, moviéndose en oposición al Espíritu Santo de Dios.

Satanás siempre ha estado en oposición directa a la obra de Dios en Su pueblo. Cuando Dios envió a Moisés a la escena, Satanás envió a Balaam. Moisés profetizó y sus profecías se cumplieron; Balaam también profetizó y sus profecías también se cumplieron. Moisés era el ungido de Dios; Balaam era el falso ungido. Cuando Dios envió a Jesús como el Cristo a Su pueblo, Satanás se opuso enviando a Judas Iscariote, con un espíritu anticristo, para traicionar a Cristo. Un Espíritu lleva a la Vida, el otro lleva a la muerte. Estos dos ESPIRITUS opuestos, han estado en combate desde el tiempo del Edén, y continuarán hasta que Cristo Jesús retorne a establecer Su Reino Milenial sobre la tierra.

Después de Su ascensión, Jesucristo envió el Espíritu Santo sobre la Iglesia. Este Espíritu Santo dio poder a los santos, moviéndolos a ser testigos del Evangelio de Cristo. El Evangelio de Jesucristo es el poder de la Palabra de Dios "para salvación a todo aquel que cree" (Rom. 1:16).

Ahora, este Caballo Blanco que apareció fue la movida de Satanás, no sólo para oponerse, sino también para falsificar la obra de Dios. El blanco simboliza pureza y el caballo representa el poder de la palabra. Satanás tenía conocimiento de todo esto. Jesucristo y Sus siervos fueron vistos (en una visión posterior de Juan) montando sobre caballos blancos (Ap. 19:11-16).

Satanás produjo su falsificación poco después de que la Iglesia comenzara. Sus falsificaciones parecieron muy similares a la obra real de Dios. De una manera astuta, Satanás comenzó a mover a la gente fuera de la revelación de la Santa Palabra de Dios. Fue una movida muy sutil. Pero ¿cómo hizo esto Satanás? Así como el Espíritu de Dios obra a través del hombre, Satanás también hizo su trabajo a través del hombre. El tuvo muchos falsos profetas. Y él tenía a su hombre sobre el caballo - "y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer". En el año 53 d.C. , el Apóstol Pablo le escribió a los santos en Tesalónica, diciéndoles que "ya está en acción el misterio de la iniquidad" (2 Tes. 2:7). Este es el espíritu del anticristo trabajando a través de los hombres (haciéndolos anticristos en la carne), quienes hacían falsificaciones de las obras del Espíritu Santo en la Iglesia. Entonces, el trigo y la cizaña comenzaron a crecer juntos en la Iglesia (ver Mateo 13). Después, mientras estaba en Mileto, durante su tercer viaje misionero, Pablo advirtió a los ancianos de Efeso diciendo, "Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos" (Hechos 20:29-30).

Nuestro Señor Jesucristo profetizó que la falsificación de Satanás de la obra de Dios, en los últimos días, se vería tan real como la genuina, que engañaría aún si fuese posible a los elegidos (Mateo 24:24). Pero, gracias a Dios, no es posible para Satanás engañar a los elegidos de Dios.

Observe que el Jinete sobre el Caballo Blanco tiene un arco sin flechas. Esto significa que él era un farsante; sólo estaba personificando a un conquistador. El no tenía una corona, pero después una le fue dada. Esto de nuevo revela que él no era el verdadero héroe - no era lo que pretendía ser - no había nacido de la realeza. ¡¡Qué farsa!! Aún así, salió como conquistador a la conquista. Satanás se estaba haciendo pasar por Cristo, de quien el Rey David cantaba, en el Salmo 24: "¿Quién es este Rey de gloria? el SEÑOR fuerte y valiente, el SEÑOR poderoso en batalla. ¿Quién es este Rey de gloria? el SEÑOR de los ejércitos, El es el Rey de gloria". Así es. Jesucristo es el Rey de gloria. El es la Palabra de Dios, santo e invencible. El no puede ser obstaculizado por ninguna circunstancia y no teme a ningún enemigo. Amén. ¡Satanás se puso en contra del espíritu del León!.

Mientras el espíritu del Anticristo comenzó a moverse en la Iglesia Primitiva de esta forma de blanco inocente, Satanás empezó a crear un sistema que atrajo a la mente carnal religiosa. Esto fue algo que encantó y sedujo a la gente de la misma forma en que la Serpiente engañó a Eva. De manera general, la gente mira con los ojos en lugar de tratar de comprender con su corazón (ver Is. 6:10). Además, a la gente le atraen las cosas grandes, poderosas y hermosas. Así pues, Satanás comenzó a vestir a los clérigos y a otorgarles títulos impresionantes (basados en la doctrina y prácticas de los Nicolaítas). El además, introdujo rituales que tienen la apariencia de piedad. Y mientras la mente carnal lo aceptaba, Satanás continuó agregando cosas que tenían forma de piedad pero sin el poder de la Palabra de Dios. De esta manera, él guió gradualmente a la Iglesia, lejos del liderazgo del Espíritu Santo de Dios en el Quíntuple Ministerio. Por supuesto, en primer lugar, aquellos que fueron engañados no pertenecían al redil de Cristo. Juan escribió algo en su epístola referente a esa rama separada, "Hijitos, ya es el último tiempo; y según vosotros oísteis que el anticristo viene, así ahora han surgido muchos anticristos; por esto conocemos que es el último tiempo. Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros" (1 Juan 2:18-19). Después, este grupo separado, cayó preso de las enseñanzas de Balaam, quien les trajo muerte espiritual, y finalmente siguieron a la mujer "Jezabel", para que fuera su maestra y líder espiritual (ver Ap. 2:14-20)

Para el tiempo de la Tercera Edad de la Iglesia (Pérgamo), el espíritu del anticristo había conquistado las almas de muchos fieles, en su galope, siguiendo las huellas del verdadero ministerio, desde Jerusalén, a través de la tierra de Israel, todo el camino hasta Asia Menor y más arriba hasta Roma. Fue durante esta misma edad, que al Jinete finalmente le fue dada una corona. Esto fue posible por la "conversión" del Emperador Romano, Constantino el Grande, quien unió la Iglesia y el Estado. Después el jinete del caballo blanco tuvo una iglesia estado reconocida, con el privilegio del poder terrenal.

Incluso hoy, el espíritu del Caballo Blanco continúa conquistando las almas de los hombres. Pero el estandarte del León de Dios también prevalece en esta hora, para contender por la fe que fue dada a los hijos de Dios. El espíritu del León, que está en Cristo Jesús, es la autoridad que Dios ha puesto en el oficio Apostólico en la Iglesia. Así estuvo en la Iglesia Primitiva y así también está presente en esta Iglesia del "Tiempo Final". Y todos los verdaderos ministros de Dios son motivados por el espíritu del "León". Sin importar lo que la Iglesia Organizada pueda decir, el ministerio del "León" nunca se ha ido de la Iglesia.

El Segundo Sello

Versos 3 y 4:

"Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente, que decía: Ven y mira".

"Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran espada".

Cuando el Cordero de Dios abrió el Segundo Sello, la segunda criatura viviente gritó, "¡Anda!" y Juan vio un Caballo Bermejo. Cuando Satanás se dio cuenta que no podría guiar a la gente totalmente afuera de la Palabra de Dios, porque el "espíritu del León" estaba guardándola, y también los verdaderos creyentes habían discernido su imitación del verdadero espíritu de Cristo, envió otro caballo - uno Rojo. Pero el Jinete era el mismo, con la misma personalidad, que el que estaba sentado en el Caballo Blanco, con la excepción de que su atuendo había cambiado. Un cambio de atuendo significa un cambio de rol. En su persecución, al anticristo no sólo le fue dado el poder de quitar la paz de la tierra, sino también de derramar la sangre de los santos de Dios, con una gran espada (gr.: "machaira") - una espada de guerra.

El Caballo Rojo vino a la escena alrededor del fin de la Segunda Edad de la Iglesia. Satanás, quien había puesto un espíritu de odio entre los Judíos y los Cristianos, movió al Imperio Romano contra los verdaderos adoradores de nuestro Señor Jesucristo, y mató a muchos de ellos. Cuando la Roma Pagana se convirtió en la Roma Papal, la cual era la 7ma cabeza de la Primera Bestia, el éxito de Satanás estaba en su apogeo. La espada del Jinete del Caballo Rojo se ensangrentó grandemente, desde el siglo IV d.C. en adelante. Los Judíos fueron asesinados porque eran "asesinos de Cristianos" o "la plaga de la tierra"; los Cristianos fueron asesinados porque eran "protestantes" contra la Iglesia Católica Romana; y muchos no - Judíos o no  -  Cristianos también fueron asesinados, solamente porque estaban en el camino. La gran espada aún continúa ensangrentada en ciertos países, pero de manera más sutil, porque está camuflada políticamente.

Ha sido calculado por auténticos historiadores que desde el 354 d.C. al siglo XVIII, se ha establecido correctamente que a través del Período de la Reforma, la Bestia Religiosa Romana ha derramado la sangre de no menos de 68.000.000 de personas, con el fin de imponer su reclamación sin fundamento, para el dominio religioso. (Este hecho histórico se encuentra en "La Gloriosa Reforma" de S. S. Schmucker, D.D., impreso en 1838).

El Caballo Rojo y su Jinete fueron enfrentados por el espíritu del Buey - la segunda criatura viviente. Este espíritu en los Cristianos de aquel período, les hizo trabajar duramente al extremo de sacrificar sus vidas voluntariamente. Cientos de miles de Cristianos sembraron sus vidas deliberadamente, como mártires, y su siembra no fue en vano; porque a causa de esto vino la "Gloriosa Reforma".

El Tercer Sello

Versos 5 y 6:

"Cuando abrió el Tercer Sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven y mira. Y miré, y he aquí un caballo negro; y el que lo montaba tenía una balanza en la mano".

"Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero no dañes el aceite ni el vino".

Cuando el Tercer Sello fue abierto, la tercera criatura viviente dijo: "¡Anda!". Esta criatura, que tenía rostro de Hombre, estaba ahí para enfrentar al Caballo Negro y a su Jinete. Bajo este Tercer Sello, el Catolicismo Romano literalmente gobernó el mundo, por alrededor de mil años. Pero este fue un tiempo "negro". Este período es conocido en la historia como la Edad Media (Edad Oscura). Comenzó en el siglo VI y terminó en el siglo XVI.

Bajo la movida del Caballo Rojo, el Jinete mató a todos aquellos que se le opusieron, o rehusaron someterse al poder de Roma. Muchos de los Cristianos que discernieron la movida del anticristo bajo el Caballo Rojo fueron asesinados. Muchos fueron encarcelados o se escondieron para evitar ser descubiertos. Mientras el Caballo Rojo continuaba con sus actividades atroces, Satanás envió su Caballo Negro con su Jinete llevando "una balanza en la mano". Durante el gobierno de la Roma Papal, la inflación y la escasez de alimento fueron un problema tanto que "dos libras de trigo" o "seis libras de cebada" costaban "un denario". El salario de un hombre era suficiente para comprar el alimento de un día, de trigo o cebada, sólo para sí mismo y no alcanzaba para su familia. Por supuesto, los verdaderos creyentes sufrieron una privación seria de comida. Proféticamente, estas palabras hablan de la Roma Papal haciendo dinero, vendiendo sus llamadas verdades religiosas, a la gente que se inclinara a su liderazgo. El Anticristo vendía los dogmas del hombre, los cuales hacía pasar como la Verdad de Dios. Se introdujeron dogmas de acuerdo a sus caprichos y fantasías, para sacarle el dinero a la gente.

Los seguidores del sistema Papal fueron grandemente engañados, porque eran ignorantes, supersticiosos y cobardes. Especialmente, tenían miedo de los dolores del purgatorio, y pagaban grandes sumas de dinero para que intercediesen por las almas de sus seres queridos fallecidos, y así pudieran escapar del purgatorio (algo que el Papado había inventado para engañar a la gente). La gente tenía que pagar dinero para tener comunión con Dios y para que sus pecados fueran perdonados. Tenían que pagar dinero cuando querían casarse, cuando un niño era nacido, o cuando alguien estaba enfermo. Literalmente, las personas tenían que pagar dinero a la iglesia por cada indulgencia "ordenada" por el Papado, y por casi todo lo religioso y pervertido. ¡Pero qué indulgencias inmundas! Los Católicos Romanos continúan teniendo las mismas indulgencias hoy. No es de extrañar que la Ciudad del Vaticano sea uno de los estados más ricos en el mundo. La Roma Papal nunca va a cambiar su religión o régimen político.

Cuando la Roma Papal llegó al poder y gobernó al mundo con su "evangelio" inmundo, el tiempo se detuvo en todos los ámbitos. Todo lo que era bueno y beneficioso para la humanidad cayó en un punto muerto. El conocimiento en cada campo de la ciencia cesó de crecer. Plagas, decesos, y pobreza azotaron la tierra con muerte. La comida era escasa. Ciudades florecientes se volvieron despobladas o simplemente se derrumbaron. Las obras malignas se extendieron desenfrenadamente. Las supersticiones ganaron el día. Fue un tiempo de gran oscuridad. Este período del Caballo Negro fue el apogeo de Satanás y de su esposa Católica Romana.

Luego, la criatura viviente que tenía rostro de Hombre, poseía la sabiduría del hombre para confrontar al espíritu del Caballo Negro. A través de Martín Lutero, el espíritu de sabiduría condenó las indulgencias que eran perjudiciales para la salvación de la humanidad. El sostuvo que no había ninguna Escritura para el comercio de indulgencias, y que esto sólo provocaba a la gente a pecar. Lutero puso sus argumentos en 95 Tesis, y las clavó en la puerta de la Catedral de Wittenberg, Alemania, el 31 de octubre de 1517. Ese día fue el principio de la Edad de la Reforma, que atravesó Europa. A lo largo de este período, el espíritu de la sabiduría del hombre, fue también encontrado en muchos otros hombres de Dios; algunos de los cuales son Bucer, Zwinglio, Calvino, Cranmer y Knox. Y la luz del Evangelio comenzó a brillar fuertemente en la gran oscuridad creada por Roma. El mensaje era claro y simple: "el justo por la fe vivirá" (Rom. 1:17). Cuando la gente comenzó a seguir la luz, el espíritu de la Roma Papal no los pudo retener más. Muchas personas se convirtieron a la Palabra de Dios. Gradualmente la gente salió de su ignorancia y abandonó sus supersticiones. Incluso comenzaron a progresar los diferentes campos de la ciencia. Sí, la Bestia Religiosa Romana había recibido una herida mortal (Ap. 13:3).

A lo largo de la Edad Media, el espíritu del Caballo Negro y su Jinete no pudieron herir "el aceite ni el vino". En los días Bíblicos, el aceite y el vino eran dos necesidades básicas que los viajeros llevaban consigo en sus viajes (ver Lucas 10:34). El aceite de oliva y el vino natural se usaban para limpiar y sanar heridas. El vino era especialmente usado en la reactivación de una persona herida y débil. Proféticamente, el aceite simboliza al Espíritu Santo y a Su unción y el vino representa el estímulo que produce la revelación de la Palabra de Dios, por la unción del mismo Espíritu. ¡Alabado sea el Señor! El Jinete satánico en su Caballo Negro no podría privar a los verdaderos creyentes de la comida espiritual del Señor Jesucristo. ¡El no podría tocar esa Vida de Dios que es el Señor Jesucristo! El Espíritu Santo se encargó de que los elegidos de Dios para esa hora recibieran el regocijo y la revelación de la Palabra. Llevó a los que llegaron al Señor, la unción y la estimulación de Su Palabra de Vida. ¡Aleluya!

El Cuarto Sello

Versos 7 y 8:

"Cuando abrió el Cuarto Sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que decía: Ven y mira".

"Miré y he aquí, un caballo amarillo, y el que lo montaba tenía por nombre Muerte, y el Hades le seguía; y le fue dada potestad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad, y con las fieras de la tierra".

En la apertura del Cuarto Sello, la cuarta criatura viviente - el Aguila Volando - gritó a gran voz, "¡Anda!", y apareció un caballo pálido. Su Jinete era la Muerte y el Infierno le seguía de cerca y les fue dado poder para detener y engullir a sus víctimas.

Ahora, en el griego original el caballo "amarillo" o "pálido", era realmente, un caballo "verde". La palabra es "chloros" la cual significa "verdoso, verdeante". Los traductores de la Biblia escogieron la palabra "amarillo", para describir al caballo, ya que su Jinete era la Muerte. La palabra usada se acercaba mucho a la verdad. Sin embargo, el verdadero color del caballo, en el idioma de los Orientales era "verde - negruzco" (negro, oscuro). El "negro" describe lo "mortal, muerte", y el "verde" describe lo "vivo, vida". Recuerde como el caballo anterior era negro, con su Jinete llevando una balanza en sus manos, pero el espíritu de la sabiduría del hombre había herido la Cabeza de la Bestia Papal. Estaba muriéndose; verdaderamente era negro. Pero entonces, Satanás envió al caballo "verde". ¿Qué estaba tratando de hacer? Estaba tratando de revivir la cabeza herida de la Bestia Religiosa Romana. Este fue su último movimiento contra Dios. Y está pasando en esta última Edad - la Edad de la Iglesia de Laodicea.

Ahora, si miramos detenidamente al cuerpo de un caballo muerto, color "verde - negruzco, palidez de muerte", nos damos cuenta de que hay una mezcla de "blanco", "rojo" y "negro", los cuales no podemos ver separadamente. Lo mismo ocurre con el último caballo. Y esta es la edad durante la cual el Caballo Amarillo está siendo montado por su Jinete llamado Muerte. El está tratando de unir las iglesias del mundo para formar una Iglesia Mundial, la cual refleja la Imagen de la Primera Bestia que Juan vio en su visión.

Satanás tuvo éxito en revivir la cabeza que fue mortalmente herida (Ap. 13:3), a través de una Imagen (Ecumenismo - Movimiento Ecuménico) formada por la Segunda Bestia (Americanismo) en honor a la Primera Bestia (Romanismo). A finales del siglo IXX, varios grupos de iglesias en América trataron de unirse como "un concilio (o alianza) de iglesias". Pero solo fue en 1948 que un movimiento religioso concreto, cristalizó una reunión en Amsterdam, Holanda, la cual culminó en la formación oficial del Concilio Mundial de Iglesias. La idea de una Iglesia Mundial fue concebida durante la reunión que duró del 4 al 20 de julio de 1968 en Uppsala, Suecia. Hoy en día, casi todas las iglesias denominacionales han sido engañadas para ser miembros de este Movimiento Ecuménico, que los está regresando a Roma, la Gran Madre Ramera Religiosa. ¡Oh, qué guiso ecuménico! ¡Qué olla ecuménica! Sí, "hay muerte en la olla" (ver 2 Reyes 4:40).

Pero Satanás no pudo engañar a los elegidos porque Dios ha enviado a Su Iglesia el Aguila, la cuarta criatura viviente que estaba alrededor del Trono de Dios. El espíritu del Aguila está aquí y está quitando la máscara satánica para que los elegidos puedan ver la movida de su Caballo Amarillo, cuyo color es cadavérico, esto es "verde negruzco", lívido, la verdosa palidez de la muerte, y la Muerte era de hecho el Jinete. Amén. El espíritu del Anticristo no podrá consumir e impresionar a los verdaderos santos del Señor Jesucristo, pero ciertamente tiene poder sobre la cuarta parte de la población mundial, para matarlos en cualquier manera diabólica que su mente pueda concebir. Sólo esperen a que Satanás se encarne en el Papa.

Ahora, los Cuatro Primeros Sellos han descubierto la evolución del anticristo, desde el principio de la Iglesia. Como Israel fue una vez derribado poco a poco por las manos del diablo (ver Joel 1:4), así sería con la Iglesia. Pero Dios ahora está restaurando a la Iglesia a la Gloria de Su Palabra, antes de volver a tratar con Israel, para restaurarlo a su antigua gloria. Pero no toda la Iglesia es la verdadera Iglesia de Cristo Jesús, así como no todo Israel es Israel. Dios sólo está restaurando a los que le pertenecen. Recuerde que Cristo y Su Novia están fuera de ese desorden podrido de la cristiandad creada por el hombre.

El Quinto Sello

En la apertura del Quinto Sello no se hacen más anuncios por parte de las cuatro criaturas vivientes, alrededor del trono de Dios. Esto revela que el sello no tiene conexión con la Iglesia del Nuevo Testamento.

Versos 9 y 10:

"Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían".

"Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra?".

Por años, estudiantes de la Biblia, han interpretado que las almas debajo del altar son de los Cristianos que fueron muertos por su fe en Jesucristo. Pero las siguientes observaciones de los versículos, desaprobarán esa interpretación. Primeramente, los versos muestran que las almas que clamaban, habían sido personas asesinadas "por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían", y no por su fe en (o su testimonio de) Cristo Jesús, y en segundo lugar, ellos clamaron y le preguntaron a Dios "¿Hasta cuando, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre?". Como los verdaderos cristianos no buscan venganza, sino que oran por los que los persiguen (ver Lucas 23:34; Hechos 7: 60; Rom. 12:19), este grupo de almas sólo pueden ser de Judíos martirizados y no de Cristianos.

Desde el tiempo en que Dios cegó los ojos de Israel (ver Rom. 11:25) y se volvió a los Gentiles con Su Evangelio, para separar de ellos una Iglesia (Hechos 15: 14-19), muchos Judíos han sido asesinados a lo largo del tiempo. Pero, durante la Segunda Guerra Mundial , de 1939 a 1945, Hitler y Eichmann de Alemania, mataron a 6.000.000 de Judíos. Este holocausto del pueblo Judío, creó en la gente del mundo una gran conciencia de los Judíos y su fe. Entonces, este fue el momento en que Dios comenzó la restauración de la tierra de Israel. Sin embargo, no todos los Judíos que fueron asesinados, murieron por su testimonio de la Palabra de Dios que había sido encomendada a ellos. Muchos maldijeron a Dios en lugar de apelar a El, cuando se enfrentaron a la muerte. Pero las almas de aquellos Judíos mártires que verdaderamente se aferraron a la promesa de Dios, de un Mesías, y esperaron por El, se encuentran bajo el altar, porque sus nombres están escritos en el Libro de la Vida. Pero, a causa de que no tenían la revelación de que Jesucristo fue su Mesías, ellos no son parte de la Iglesia Redimida de Cristo, del Nuevo Testamento. De todas maneras, Dios ha ordenado un lugar para Israel, incluso antes de que la fundación del mundo fuera llevada a cabo. Dios no pudo anular la promesa que hizo con Abraham, cuando cegó a los hijos de Israel para bien de los Gentiles. ( Leer Romanos capítulo 11). Israel fue predestinado para que fuera el testigo de Dios, desde que El hizo un pacto con ellos. En el Oráculo que le fue dado, Israel tuvo la revelación de un Unico Dios Verdadero (Monoteísmo), aunque sus descendientes fallaron en ver al Mesías, y por causa de esto fueron cegados. Ellos sabían que el Mesías sería Dios pero ellos no pudieron ver el Misterio de Dios revelado en Cristo. Por otro lado, las mentes de los Gentiles, a quienes les fue dado Gracia para que pudieran ver su necesidad de aceptar a Cristo como su Salvador, están tan paganizadas que la mayoría de ellos concibe a Jesucristo como una tercera parte de la plenitud de la Deidad. (Por favor leer Colosenses 1:19 y 2:9). Por lo tanto, inconcientemente se han suscripto al Politeísmo. Pero la Novia de Jesucristo en esta hora tiene la completa revelación de la Unidad de la Divinidad.

Verso 11:

"Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos".

La elección de Dios se mantiene segura. Aquellas almas martirizadas, bajo el altar, son salvas aunque no tienen el "nuevo nacimiento", la experiencia de un verdadero Cristiano. Esto es ampliamente respaldado por el hecho de que no poseen "vestiduras blancas", como los Cristianos. (Todos los Cristianos poseen "vestiduras blancas", pero un cierto número de ellos serán vestidos con "lino fino". Compare Apocalipsis 7:9-17 y 19:7-9,11-16). En lugar de eso, "se les dieron vestiduras blancas", significando que les fue dada salvación; ellos son salvos. Tienen la misericordia de Dios. Ahora, esas almas no fueron salvadas por el Evangelio de Jesucristo; nunca, en absoluto creyeron en Jesucristo. Sino que fueron salvos por la Gracia de la elección de Dios. Ellos tenían el testimonio de Dios y mantuvieron sus mandamientos.

Como José, que fue vendido por sus hermanos a Egipto, Cristo Jesús fue vendido por los Judíos a los romanos. Mientras José estaba en Egipto, tomó para sí una esposa Gentil. Más tarde, cuando sus hermanos vinieron a Egipto y se dieron cuenta quien era José, tuvieron miedo de que los mataría por haberlo maltratado. Lo mismo ocurrió con esas almas de los Judíos debajo del altar, cuando se dieron cuenta quien era realmente Jesucristo. Pero como José perdonó a sus hermanos, Jesús también perdonó a esos Judíos. La misericordia de Dios los cubrió, porque El los había cegado con un propósito, así como también José fue vendido a Egipto para lograr un propósito. En ambos casos, las vidas fueron salvadas, de acuerdo a los planes de la predestinación de Dios.

Ahora, a estas almas de los Judíos asesinados, se les dijo que descansaran o esperaran por "un poco de tiempo", un pequeño tiempo, hasta que el número de sus consiervos y los hermanos de su parentela, quienes han de ser muertos como ellos, esté completo. Ahora, el "poco de tiempo", apunta al período desde el año 1948, cuando Israel se convirtió en una nación, y volvió a la tierra de Aquel a quien ellos habían traspasado. Este "poco de tiempo" no se extenderá más allá de la "generación" que Jesús habló en Mateo 24:32-35 - "De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca. Así también, cuando veáis todas estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas. De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca". La profecía de la higuera reverdeciendo sus hojas, apunta al regreso de los Judíos a su patria.

Santos de Dios, esta presente generación verá el regreso de Cristo por Su Novia. Esta es, también, la misma generación que verá otro baño de sangre sobre Israel. Esto ocurrirá cuando el Anticristo rompa su pacto de siete años, referente a Israel, tres años y medio después de que lo haya firmado con los hombres políticos y religiosos. Miles de creyentes Judíos, cuyos nombres están escritos en el Libro de la Vida, morirán por su fe en el período terrible de la Gran Tribulación. La generación terminará con la venida de Cristo y Su Novia a la Batalla de Armagedón, después de la Gran Tribulación, que completará la profecía de las Setenta Semanas de Daniel (Daniel 9:24-27).

Una cosa importante, concerniente al Séptimo Sello, debe ser mencionada. Aunque el Séptimo Sello no está mencionado en este capítulo, su cumplimiento ocurre en este "poco de tiempo" del verso 11, que separa los dos baños de sangre de los creyentes Judíos. Cuando el Séptimo Sello fue abierto en Apocalipsis 8:1, Juan no vio nada, pero presenció un breve período de silencio en el cielo. Los teólogos, generalmente, creen que el Séptimo Sello consiste de las Siete Trompetas, Siete Copas y todo lo demás. Si hubiera sido así, ¿no lo hubiera visto y escrito Juan? (Sólo esperen a que lleguemos a Apocalipsis capítulo 10).

El Sexto Sello

Verso 12: "Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre";
Verso 13: "y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento".
Verso 14: "Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar".
Verso 15: "Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes";
Verso 16: "y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero";
Verso 17: "porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie?".

El Sexto Sello se abrió para revelar el "escenario" en el Día del Señor, que vendrá justo en el final de los tres años y medio de la Gran Tribulación. Inmediatamente antes de eso, la Séptima Trompeta sonará para anunciar el Reino de nuestro Señor Jesucristo (Ap. 11:15-19). Con este sonido, "el templo del tabernáculo del testimonio en el cielo", fue abierto (Ap. 15:5), trayendo el "asiento de misericordia" sobre el Arca del Pacto, para demostrar por completo, que la "MISERICORDIA" ya no está "sentada" sobre el "asiento de misericordia". Esto significa que la "sangre" ya no estará sobre el "asiento de misericordia", es decir, que la misericordia será retenida, hasta después que el último elegido sea asesinado en la Gran Tribulación. También, los Siete Angeles se dispondrán a derramar las Siete Copas de las plagas de Dios sobre la tierra (Ap. 15:1; 16:1). Ellas son la ira de Dios. Una vez que estas Siete Copas hayan sido derramadas, el Sexto Sello inmediatamente entrará en vigor. "E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria" (Mateo 24:29-30).

¡¡Qué día!! El cielo y la tierra serán sacudidos en gran manera cuando aquel fenómeno inusual ocurra. Habrá temor y angustia sobre la gente de todas las naciones. "Entonces habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, confundidas a causa del bramido del mar y de las olas; desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán sobre la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas" (Lucas 21:25-26).

Este Día del Señor cubre un período de 75 días, empezando con el derramamiento de la ira de Dios sobre la tierra. Incluye la Batalla de Armagedón (Ap. 19:11-21; Zac. 14:1-4,12) , la Resurrección de los Santos de la Tribulación (Ap. 11:18; 20:4) y culmina con el Juicio de las Naciones (Mateo 25:31-46) antes de que la Era de la Regeneración (Mateo 19:28) comience. Este período de 75 días se obtiene de los 1335 días mencionados en Daniel 12:12, restando 1260 días (o 42 meses) que el Anticristo reinará después de quitar el sacrificio diario de Israel, en la mitad de la Semana Setenta (de Daniel 9:24-27).

Para cerrar este capítulo, déjenme decir que es antiescritural que alguien enseñe que la Iglesia de Cristo tiene que ir a través de la Gran Tribulación antes de ser raptada. La Biblia claramente enseña que hay dos grupos de "pueblo Cristiano", uno es llamado el "trigo" y el otro es llamado la "cizaña" (Mateo 13:24-30,36-43). El "trigo", son los verdaderos creyentes de la Palabra, mientras que la "cizaña" son los falsos creyentes (o creyentes manufacturados) de la Palabra. El grupo del "trigo" está dividido en dos categorías que son específicamente llamadas las "vírgenes prudentes" y las "vírgenes fatuas". Estas "vírgenes" son Cristianos que desean el encuentro con el Novio (quien es, Cristo la Palabra y el Señor). Pero sólo las "vírgenes prudentes" llegarán al encuentro con el Señor e irán al matrimonio. Las "vírgenes fatuas" se quedarán afuera de esto. Leer Mateo 25. Por lo tanto, los Cristianos "vírgenes prudentes" se irán en el Rapto, antes de que la Gran Tribulación comience. Las "vírgenes fatuas" tendrán que hacer frente a la indignación del Anticristo y morir en su mano como mártires, antes de que la ira de Dios sea derramada.